En medio de un fuerte ajuste en el sistema nacional de ciencia y tecnología, la Provincia de Buenos Aires ha anunciado la creación de cinco centros de Ciencias destinados a promover el conocimiento científico y fomentar las vocaciones entre los jóvenes. Esta iniciativa, que se da en un contexto de preocupaciones sobre el financiamiento a nivel nacional, buscará ofrecer un espacio accesible y gratuito para la formación científica en diversas localidades de la provincia.
Creación de los centros científicos
La medida fue formalizada mediante el decreto 1379/25, publicado en el Boletín Oficial, que establece los "Centros de Ciencias de la Provincia de Buenos Aires". El objetivo principal de estos centros será difundir y promover el conocimiento científico-tecnológico, adaptando las propuestas a las características y capacidades de cada región. Así, se espera que cada centro pueda responder a las necesidades específicas de su comunidad.
Organización y administración
Los centros estarán bajo la supervisión del Ministerio de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica. Según el decreto, uno de los primeros pasos será la definición de las sedes y autoridades que estarán a cargo de estos espacios. También se deberá llevar a cabo la selección y contratación de los recursos necesarios para su funcionamiento y mantenimiento, garantizando que el acceso sea público y gratuito, con un enfoque marcado en las juventudes.
Contexto crítico en el financiamiento científico
Esta iniciativa provincial se presenta en un escenario de preocupaciones por el desfinanciamiento de la ciencia a nivel nacional. La administración de Axel Kicillof enfrenta un contexto de ajuste que, según la Academia Nacional de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, ha generado una grave situación en el sistema nacional de Ciencia, Técnica e Innovación (CTI).
Recientemente, la academia advirtió sobre la "abrupta disminución del financiamiento" y la proyección decreciente del número de investigadores y técnicos, lo que ha impactado negativamente en el mantenimiento de equipos e infraestructura. Esta situación, según la entidad, podría tener graves consecuencias en el futuro de la investigación en el país.
Los problemas en el sector han generado manifestaciones como la reciente marcha masiva de científicos del CONICET, que se llevó a cabo a fines de mayo bajo la consigna "Nadie se salva solo". Esta protesta, que tuvo su punto álgido en el Polo Científico de Palermo, se multiplicó en varias provincias y evidenció el rechazo al vaciamiento del sector científico.