La demora en la finalización del Plan Maestro del Salado, una iniciativa crucial para la gestión del agua en la provincia de Buenos Aires, ha generado pérdidas económicas significativas y ha suscitado preocupaciones entre los productores locales. Este proyecto, anunciado en 1999 durante el gobierno de Felipe Solá, debería haberse culminado en 2014, pero hasta la fecha solo se ha completado el 50% de las obras programadas.
Impacto Económico de la Demora
Según un informe de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), el retraso ha provocado pérdidas estimadas en 40.000 millones de dólares. El documento, titulado "El Salado, el alto costo de la inacción", también revela que el costo actual del Plan asciende a 4.000 millones de dólares.
CARBAP señala que, durante la última década, el sector agropecuario ha contribuido con 35.000 millones de dólares en concepto de retenciones, lo que reitera la paradoja de que “la región ha financiado reiteradamente las obras que se le siguen negando”. Estas cifras subrayan la urgencia de avanzar en las obras, especialmente en un territorio que juega un papel fundamental en la producción agrícola nacional.
Descripción del Plan Maestro
El Plan Maestro del Salado fue diseñado por Halcrow & Partners con financiamiento del Banco Mundial. Este proyecto abarca una cuenca de 17 millones de hectáreas, que contiene el 75% del stock vacuno bonaerense y produce más del 70% de los granos de la provincia. Según la evaluación, la falta de avance ha ocasionado pérdidas productivas evitables que ascienden a 5.000 millones de dólares.
El informe de CARBAP también resalta los numerosos eventos de inundación que han afectado a la cuenca desde la puesta en marcha del plan. Estos eventos han tenido un impacto severo, como el sucedido en 2017, afectando vastas áreas del territorio.
Crisis Climática y Reclamaciones
En el contexto actual, 2025 ha sido un año especialmente crítico debido a tres eventos climáticos severos, que han dejado a más de 2 millones de hectáreas anegadas. Las zonas donde las obras han progresado muestran una recuperación más rápida, lo que ilustra la eficacia de las inversiones en infraestructura.
El consejo Honorario Asesor del Río Salado de CARBAP ha exigido al gobierno de Javier Milei que reactive de manera inmediata el dragado del río, especialmente en su Tramo IV. Este llamado se intensificó tras las inundaciones de principios de mayo, que afectaron a 28 ciudades, entre ellas Zárate y Campana.
Dicha paralización fue formalizada en marzo, con una letra administrativa de 60 días, y desde entonces los productores han demandado que la situación sea atendida con urgencia. CARBAP advierte que la inacción en un solo tramo impacta negativamente en el desarrollo de otras obras necesarias para mitigar los efectos de las inundaciones.
Conclusiones de un Informe Alarmante
El informe de CARBAP concluye con un fuerte mensaje: “No existen argumentos técnicos, económicos ni éticos que justifiquen seguir postergando una solución que ha sido largamente planificada y que cuenta con financiamiento parcial”. La entidad estima que el costo acumulado por la falta de acción es ya demasiado alto para ser ignorado.
