Comprar en Shein puede parecer una opción atractiva debido a sus precios bajos y amplia variedad, pero la realidad es que existen costos ocultos que los consumidores deben considerar. En un contexto donde la plataforma china se ha vuelto cada vez más popular en Argentina y Europa, las críticas han aumentado en torno a la calidad de sus productos, el impacto ambiental y las condiciones laborales en su cadena de producción.
Riesgos de Shein: los verdaderos costos ocultos
La modalidad de moda ultrarrápida ha sido clave para el crecimiento de Shein. Este modelo comercial permite lanzar miles de nuevos productos semanalmente a precios accesibles, pero conlleva consecuencias significativas en varios ámbitos.
Impacto medioambiental
La industria de la moda es una de las más contaminantes. Se estima que se utilizan hasta 20.000 litros de agua para producir un solo kilo de algodón. Además, el vertido de tintes y químicos tóxicos en ríos de países productores ha generado severa contaminación. Globalmente, los residuos textiles han aumentado de 16 a más de 90 millones de toneladas anuales en solo cinco años.
Condiciones laborales cuestionables
Las fábricas donde se produce la ropa de Shein son criticadas por sus bajos estándares laborales. Los trabajadores enfrentan jornadas de más de 75 horas semanales y reciben salarios que caen por debajo del nivel básico de subsistencia, lo que suscita preocupaciones respecto al trato justo y digno.
Riesgos para la salud
Una investigación de la Comisión Europea ha revelado la presencia de productos peligrosos en plataformas como Shein. Algunos ejemplos incluyen chupetes con piezas sueltas, ropa infantil con químicos prohibidos, y cosméticos que contienen ingredientes tóxicos, como el Lillal, el cual está prohibido en la UE desde 2022.
Medidas regulatorias en Europa
Frente a estas problemáticas, la Unión Europea ha comenzado a implementar medidas para frenar la importación de productos que no cumplen con sus normas. Las iniciativas incluyen:
- Eliminación del umbral de exención de impuestos para compras inferiores a 150 euros.
- Creación de una tasa por paquete importado, aprobada en 2 euros por envío.
- Propuestas para gravar hasta 10 euros por prenda contaminante, limitar la publicidad de estas marcas y sancionar a influencers que las promocionen.
Alternativas sostenibles a Shein y Temu
Con el auge de Shein, han surgido diversas alternativas más sostenibles:
- Reutilización de prendas.
- Compra y venta de ropa usada a través de aplicaciones como Vinted.
- Alquiler de ropa para eventos.
- Marcas locales que promueven la producción ética y duradera.
Además, es fundamental evaluar no solo el precio inicial de las prendas, sino el costo por uso. Inversiones a corto plazo en artículos de baja calidad suelen resultar más costosas con el tiempo. Un estudio comparativo de precios ha demostrado que varios productos en el barrio de Once son más económicos que en Shein, considerando también los impuestos de importación y costos de envío. La compra directa en Once garantiza que el consumidor obtenga el producto de forma inmediata, evitando esperas de hasta 30 días.