Esta demanda marca un hito en la lucha entre los medios de comunicación y las grandes plataformas tecnológicas. Por primera vez, un editor de gran relevancia, Penske Media, ha llevado a Google a los tribunales, alegando que el uso de su contenido sin autorización para generar resúmenes automáticos ha impactado negativamente en su tráfico y por ende, en sus ingresos. La disputa, iniciada el viernes pasado en un tribunal de Washington D.C., destaca la creciente preocupación en la industria del entretenimiento sobre el control que ejercen las gigantes tecnológicas.
Qué son los AI Overviews y cómo afectan a los medios
Los AI Overviews son resúmenes automáticos creados por los algoritmos de inteligencia artificial de Google, que aparecen en los resultados de búsqueda. Este formato permite a los usuarios acceder a información condensada sin necesidad de clicar en los enlaces de los medios originales. Penske Media afirma que, a partir de esta práctica, la compañía solo incluía sus contenidos si podían ser reutilizados para estos resúmenes, evitando así compensar adecuadamente a los editores.
Estos resúmenes fueron lanzados en mayo de 2024 en Estados Unidos y comenzaron a implementarse en otros países como Brasil, India, Japón y México desde agosto, generando tensiones en la relación entre Google y los medios de comunicación.
Las consecuencias para los medios de comunicación
Penske Media, la cual recibe aproximadamente 120 millones de visitas mensuales, ha informado que el 20% de las búsquedas en Google que incluyen enlaces a sus medios muestran los AI Overviews, lo que ha contribuido a una disminución en el tráfico. Desde su pico a finales de 2024, los ingresos por afiliación de la compañía han caído más de un 30%, debido principalmente a la reducción de visitas a sus sitios.
Jay Penske, CEO de Penske Media, subrayó la importancia de defender los derechos de los creadores de contenido: “Es nuestra responsabilidad luchar por el futuro de los medios digitales… el futuro de los medios digitales y la calidad del contenido original están seriamente amenazados”.
El contexto del conflicto: otras demandas y la postura de Google
Esta no es la primera vez que Google enfrenta críticas. En febrero de 2025, la empresa educativa Chegg también demandó a Google, alegando que los resúmenes AI disminuían la demanda de contenido original, afectando a editores y creadores. En respuesta a la reciente demanda de Penske, Google defienden su práctica afirmando que los AI Overviews mejoran la experiencia del usuario, con el portavoz José Castañeda argumentando que estos resúmenes permiten a los usuarios encontrar información de manera más eficiente.
El panorama antimonopolio y la creciente preocupación de los editores
Este litigio se desarrolla en un contexto más amplio de tensiones entre los medios y las plataformas tecnológicas. A principios de este mes, Google obtuvo una victoria en un juicio antimonopolio, donde un juez determinó que no estaba obligado a vender su navegador Chrome. Este fallo generó preocupación entre los editores, quienes ven cómo la News/Media Alliance, que representa a más de 2,200 medios en Estados Unidos, expresa su descontento con el poder de mercado de Google.
Danielle Coffey, directora ejecutiva de News/Media Alliance, enfatizó el problema del poder desmedido de Google en el mercado, señalando que la falta de acuerdos de licencia, a diferencia de lo que hacen otras empresas de inteligencia artificial, complica aún más la situación.
El futuro de los medios digitales y el desafío de la inteligencia artificial
La demanda de Penske Media destaca una de las tensiones centrales en la era digital: la redistribución de los beneficios derivados del contenido de los medios tradicionales ante la creciente influencia de la inteligencia artificial. A pesar de que los AI Overviews pueden facilitar el acceso a la información para los usuarios, su impacto en los editores sigue siendo un tema controversial.
Esta disputa no solo refleja los desafíos inmediatos que enfrentan los medios, sino que también plantea interrogantes sobre cómo se deberían gestionar los derechos de autor y la monetización en una era donde la IA desempeña un papel central. La industria de los medios se encuentra en una encrucijada, buscando adaptarse a un ecosistema dominado por empresas tecnológicas que poseen un control significativo sobre el tráfico digital.