El ministerio de Economía argentino, liderado por Luis Caputo, presentó un nuevo régimen que busca facilitar el uso de dólares no declarados en la economía doméstica. Esta medida permitirá a los ahorristas adquirir bienes como autos y propiedades sin necesidad de verificar el origen de los fondos. Un cambio significativo que podría transformar la dinámica del ahorro en el país.
Cambios en el Régimen de Información
El nuevo régimen trae consigo varias derogaciones importantes que modifican las obligaciones de reporte ante la Administración Federal de Ingresos Públicos (ARCA):
- Se eliminan los regímenes de información que obligaban a comercios y profesionales a remitir datos sobre las operaciones de los ciudadanos.
- El reporte CITI de las escribanías será abolido, descomplicando el proceso de compra y venta de inmuebles.
- Las operaciones de compra-venta de vehículos usados dejarán de ser informadas a ARCA, facilitando transacciones.
Eliminación de Informes Regulatorios
La reforma también incluye la derogación de varios regímenes informativos, que abarcan diferentes ámbitos:
- Los proveedores de servicios públicos ya no deberán reportar consumos relevantes de electricidad, agua, gas y telefonía.
- Los bancos cesarán de informar sobre transferencias y acreditaciones menores a $50 millones para personas físicas y $30 millones para personas jurídicas.
- Las extracciones se informarán a partir de $10 millones tanto para personas físicas como jurídicas.
Nuevos Umbrales de Reporte
Con la implementación de este régimen, se modifican los umbrales de información, lo que podría afectar a numerosos contribuyentes:
- Las transferencias y acreditaciones en billeteras virtuales se informarán a partir de $50 millones para personas físicas y $30 millones para jurídicas.
- Los plazos fijos serán informados a partir de $100 millones para personas físicas y $30 millones para jurídicas.
- Las compras de consumidor final, que antes requerían reportar montos a partir de $250.000 en efectivo y $400.000 en otros medios, ahora se informarán a partir de $10 millones.
Este nuevo enfoque busca desregular y simplificar el proceso de utilización de dólares no declarados, un tema que ha sido objeto de debate en el ámbito económico nacional.