La estrategia electoral de Javier Milei se centra en reivindicar la "batalla cultural" que lo catapultó a la Casa Rosada en 2023. En un evento realizado el pasado lunes, donde presentó un nuevo libro, el presidente intentó recuperar la esencia del Milei showman, apelando a un estilo que mezcla valores tradicionales con estética rockera y un discurso “anti woke”. Este enfoque busca reconectar con el electorado joven y mantener su relevancia en la política argentina, después de un período de reveses y caídas en las encuestas.
El retorno del showman
La presentación del libro estuvo marcada por la influencia de Santiago Caputo y otros asesores que han sido claves en la construcción del fenómeno Milei. La intención fue recuperar la mística del líder que se presenta como un “outsider” de la política, dispuesto a todo para difundir su pensamiento liberal. Sin embargo, analistas advierten que esta estrategia también conlleva un riesgo electoral considerable debido al contexto actual del país, caracterizado por una imagen negativa en las encuestas, donde el 63% de los argentinos lo perciben desfavorablemente tras escándalos recientes.
La esencia política y cultural
Javier Milei se propone superar los límites establecidos por otros líderes políticos a través de una estrategia de celebrity. Carlos Menem y Cristina Kirchner en el pasado ya habían utilizado este enfoque para conectar con las masas, pero Milei busca llevar esta táctica a otro nivel. A través de desafíos sarcásticos y un uso desenfadado de símbolos patrios, ha intentado volver a establecer su conexión con un electorado que se ha sentido desencantado con la política tradicional.
Un mensaje centrado en la cultura
En su presentación, Milei enfatizó la importancia de “dar la batalla cultural” y de no limitarse a hablar de temas económicos. A pesar de hacer referencia a logros como la baja de la inflación y la rebaja de impuestos, omitió aspectos críticos del contexto económico actual, como el aumento del riesgo país o la necesidad de un salvataje financiero. Este giro hacia la cultura refleja un intento de acercarse a la juventud, animándola a participar en la defensa de su visión política en las redes sociales.
Dilema estratégico
Los analistas políticos debatirán en los próximos días si el evento fue una jugada astuta o un efecto boomerang en medio de la crisis. Hay opiniones divididas: algunos sostienen que Milei ha entendido mal el contexto actual y que su estilo, que en 2023 representaba cambio, ahora puede ser visto como patético. Otros, en cambio, consideran que su enfoque puede reforzar el vínculo con su núcleo duro de votantes, asegurando un piso del 30% de votos en futuras elecciones.
Con el próximo proceso electoral a la vista, tendrá lugar un análisis exhaustivo sobre si la estrategia de Milei logrará revitalizar su imagen y captar el apoyo necesario para enfrentar las urnas nuevamente, después de un periodo marcado por el desencanto y el descontento en la ciudadanía.


















