Javier Milei ha designado a Diego Santilli como el nuevo ministro del Interior, reemplazando a Lisandro Catalán, quien presentó su renuncia el pasado viernes. Santilli será responsable de la coordinación con gobernadores y legisladores para lograr consensos en el Congreso, alineándose con las reformas que el Gobierno prevé implementar en el futuro.
Celebración del Presidente
El Presidente Milei anunció la nueva designación a través de su cuenta en X, expresando: "TENEMOS MINISTRO DEL INTERIOR: Bienvenido Colo Santilli". Este mensaje fue rapidamente respaldado por su jefe de Gabinete, Manuel Adorni, y el ministro de Economía, Luis Caputo. La designación de Santilli llega tras el triunfo electoral del oficialismo en la provincia de Buenos Aires en las elecciones legislativas del pasado domingo.
Trayectoria política de Santilli
Diego Santilli ha tenido un rol clave en la reciente campaña electoral, consolidándose como un líder en la provincia de Buenos Aires. Su triunfo en las elecciones legislativas del 27 de octubre fue especialmente significativo, dado que asumió la responsabilidad de la campaña tras la controversia que rodeó a José Luis Espert, quien retiró su candidatura por acusaciones relacionadas con el narcotráfico, específicamente con Fred Machado.
Su llegada al Gabinete responde a la necesidad de recortar distancias con el peronismo, ya que las elecciones del 7 de septiembre habían dejado a los libertarios a más de diez puntos de distancia. Con Santilli como figura central, el Gobierno logró una remontada histórica en la provincia.
Cambios en la estructura del Gabinete
Previo a la elección de Santilli, se mencionó también a Santiago Caputo como candidato para el ministerio del Interior. Sin embargo, Milei optó por Santilli, quien deberá articular esfuerzos con aliados del sector opositor para impulsar reformas clave en el Congreso, como las reformas laboral y tributaria.
Además, la búsqueda de consensos legislativos se alinea con las exigencias impuestas por Estados Unidos para proporcionar asistencia económica, colocando a Santilli en una posición que requerirá un delicado manejo entre la política interna y las condiciones externas.
