El presidente Javier Milei ha responsabilizado a la vicepresidenta Victoria Villarruel por la reciente escalada del dólar, asegurando que su participación en una “sesión ilegal” provocó un ataque especulativo contra el peso argentino. Este intercambio de acusaciones resalta tensiones dentro del gobierno y plantea dudas en torno a la estabilidad económica.
Acusaciones Cruzadas
Milei, en una entrevista con Alejandro Fantino, afirmó que “la traidora dio lugar a una sesión ilegal para que nos rompan el equilibrio fiscal”. Según el presidente, esta sesión fue el detonante de una corrida cambiaria, que fue aprovechada por bancos para operar con un “bolsón de liquidez”.
Por otro lado, el ministro de Economía, Luis Caputo, ofreció una visión diferente, atribuyendo el aumento del dólar al “riesgo K” y tratando de minimizar el impacto en los mercados. Caputo indicó que el Banco Central tiene las herramientas necesarias para manejar la situación y absorber la liquidez requerida.
Efectos en el Mercado
El impacto de estas acusaciones se ha sentido en el mercado, donde el día de la declaración de Milei, se observó una gran volatilidad en el tipo de cambio. Analistas han resaltado que las disputas políticas pueden contribuir al clima de incertidumbre económica, afectando tanto la confianza de los inversores como la estabilidad del peso argentino.
Este cruce de declaraciones refuerza la percepción de un entorno político fracturado, justo en un momento crítico para la economía nacional. La situación sigue desarrollándose, con diversas opiniones sobre las posibles soluciones para estabilizar el mercado cambiario.