Los trabajadores del Hospital Garrahan celebran el rechazo del Senado al veto del presidente Javier Milei a la ley de emergencia pediátrica, medida que busca mitigar el ajuste del Gobierno sobre la salud pública. Aunque los profesionales reconocen que esta decisión no resuelve por completo la grave situación del sector, la consideran un paso positivo y se mantienen en estado de alerta ante posibles resoluciones del Ejecutivo.
Aprobación de la Ley de Emergencia Pediátrica
La iniciativa de emergencia pediátrica fue aprobada con un respaldo significativo: 59 votos a favor, 7 en contra y 3 abstenciones. Esta nueva legislación incluye la recomposición salarial para los trabajadores de salud y destina fondos para asegurar la provisión de medicamentos, vacunas, insumos y mantenimiento edilicio.
Entre los beneficios otorgados, destaca la exención del pago de Ganancias para el personal sanitario que realice actividades críticas, horas extras o guardias. La aprobación se produjo en un contexto de movilización, dado que los trabajadores del Hospital Garrahan habían iniciado un paro que comenzó el miércoles por la noche y se extenderá hasta el viernes por la mañana, junto con una movilización al Congreso.
Reacciones a la Decisión del Senado
El veto del presidente, oficializado el 10 de septiembre y argumentado por la falta de "sostén presupuestario", generó descontento en el personal médico. Pablo Puccar, jefe del área de cuidados intermedios del Garrahan, expresó su escepticismo respecto a la postura del Gobierno: "Llevamos mucho tiempo con este reclamo… ahora estamos esperando qué hará el Gobierno para no aplicar la ley".
Respecto a la ley, Puccar señaló que si bien esta recompone parcialmente los salarios, no soluciona el conflicto salarial actual. También enfatizó que la crisis actual ha llevado a la pérdida de profesionales, complicando la atención de pacientes graves.
La Realidad del Hospital Garrahan
La pediatra Rita Fernández también compartió su satisfacción con el rechazo al veto, pero subrayó que aún queda el desafío de implementar la ley. "Seguimos en pie de guerra y movilizados. Continuaremos activos hasta que se implemente la ley", advirtió.
Ambos profesionales manifestaron su preocupación por el impacto de las renuncias sobre la atención en el hospital. Hasta el momento, aproximadamente 250 profesionales han dejado sus puestos, lo que agrava la situación en un contexto donde ya se presentan demoras en turnos y cirugías.
Condiciones Laborales y Salariales
La precariedad de los salarios en el Hospital Garrahan es un tema recurrente. Según los trabajadores, la recomposición de los salarios es urgente, ya que desde diciembre de 2023, muchos sueldos han quedado por debajo de la línea de pobreza. Aunque se ha otorgado un bono transitorio, este no es suficiente para mitigar la crisis.
Un médico que comienza su carrera puede ganar en promedio $2 millones al mes, lo que es considerado insuficiente para cubrir las necesidades básicas. Los trabajadores continúan exigiendo una recomposición del 100% de los salarios con el objetivo de que ningún empleado quede por debajo del umbral de pobreza.
Los profesionales de la salud en el Garrahan continúan alertando por la falta de recursos y la deterioración de las condiciones laborales, claves para asegurar un sistema de salud pública eficaz. La reciente ley podría ofrecer un respiro momentáneo, pero las tensiones siguen latentes.