El programa de ayuda económica para estudiantes, Becas Progresar, celebra su undécimo aniversario en un contexto de significativos recortes presupuestarios. Desde la llegada de Javier Milei a la presidencia, se han eliminado 500 mil beneficiarios y el poder adquisitivo de las becas ha disminuido un 44%.
Impacto del ajuste en el presupuesto
Según el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), el presupuesto destinado a las becas ha sufrido una caída del 90% en términos reales desde diciembre de 2023 hasta finales de 2024, y se proyecta una nueva reducción del 18% para el año 2025. A pesar de contar con un presupuesto mayor en términos reales en 2024, el programa alcanzó solo a un millón de jóvenes, muy por debajo de la meta oficial de 1.5 millones.
Montos y condiciones de las becas
El monto de las becas varía de $28.000 a $35.000, dependiendo de la categoría. Los estudiantes que mantengan su regularidad académica pueden acceder a un bono excepcional de hasta $56.000. Es importante que los beneficiarios cumplan con requisitos académicos y de asistencia para continuar recibiendo esta ayuda.
Consecuencias de la reducción de beneficiarios
El informe de CEPA detalla que la reducción en el número de beneficiarios entre 2019 y 2025 ha impactado directamente en los fondos disponibles. La lógica del ajuste ha sido proporcional, afectando tanto los montos de las becas como a los destinatarios. Inicialmente creado en 2014 para ofrecer apoyo a estudiantes de hogares con ingresos menores al salario mínimo, Becas Progresar hoy incluye tres líneas: Obligatorio, Superior y Trabajo.
Desafíos del programa
La reducción presupuestaria afecta gravemente el objetivo fundamental del programa: acompañar a jóvenes de entre 18 y 24 años en su trayectoria educativa. La situación actual pone en tela de juicio la sostenibilidad del programa en un contexto de creciente necesidad económica entre los estudiantes.