El Gobierno de la Provincia de Buenos Aires ha reiniciado las discusiones paritarias con sindicatos docentes y estatales. Este martes, en la primera jornada de encuentros, no se presentó una propuesta formal y se decidió pasar a un cuarto intermedio. Las conversaciones abarcan temas críticos como el impacto inflacionario en los salarios y las problemáticas financieras que enfrenta la provincia.
Reuniones con sindicatos docentes
Las autoridades de los ministerios de Economía, Empleo Público, Hacienda, Educación y Trabajo se reunieron con los gremios docentes. Durante esta primera instancia, realizaron un análisis sobre los índices de inflación y los efectos que tienen en los salarios de los docentes.
El Frente de Unidad Docente Bonaerense (FUDB) reportó que el Gobierno expuso las dificultades financieras actuales, relacionadas con decisiones del Gobierno Nacional. En particular, se mencionó una deuda que asciende a $12 billones, según el ministro Carlos Bianco.
Los sindicatos solicitaron un incremento salarial para agosto para recuperar poder adquisitivo, dado que en esta semana se efectúa el pago del aumento correspondiente a julio. Los gremios destacaron que el Ejecutivo provincial tomó nota de sus demandas y acordaron una nueva reunión para el viernes 8 de agosto.
Conversaciones con trabajadores estatales
Simultáneamente, a partir de las 12:30, se llevaron a cabo discusiones con trabajadores de la administración pública bajo la Ley 10.430. En este contexto, ATE bonaerense se reunió en el ministerio de Trabajo para alcanzar un acuerdo que mejore el poder adquisitivo, centrándose en aquellos con menores ingresos.
Desde ATE se planteó la necesidad de un salario de emergencia y el pase a planta permanente de los empleados temporarios, incluyendo los que ingresaron en 2025. Dentro del sector salud, se pidió que las becas de capacitación pasen a ser de contingencia a partir del 1° de septiembre, y se solicitó la creación de una mesa de seguimiento para el pase a planta de becarios.
Además, se abordaron propuestas para reducir la jornada laboral de 40 a 30 horas sin afectaciones en el salario y se discutieron recategorizaciones y el Convenio Colectivo de Trabajo. Por su parte, UPCN exigió que se considere un aumento salarial para agosto, aunque anticiparon que la provincia estudiaba un incremento en cuotas para septiembre y octubre.
Expectativas y próximos pasos
Las autoridades provinciales mencionaron que las negociaciones podrían extenderse durante varios días y se comprometieron a hacer un esfuerzo significativo para evitar la caída del poder adquisitivo de los salarios. La posibilidad de un acuerdo depende de cómo avancen las discusiones en las próximas reuniones.