El mercado cambiario argentino presenta fluctuaciones significativas en el valor del dólar, lo que genera preocupación ante la inestabilidad económica del país. En un contexto post-electoral, el dólar oficial y los tipos de cambio financieros han experimentado aumentos considerables, impactando tanto a consumidores como a inversores.
Cotización del Dólar Oficial
El dólar oficial se encuentra actualmente cotizado a $1.440 para la compra y $1.490 para la venta en el Banco Nación, mientras que en otras entidades, como el ICBC, su precio alcanza los $1.500. Desde las elecciones bonaerenses, esta divisa ha incrementado su valor en $105, reflejando la tensión en el mercado. El tipo de cambio mayorista se mantiene en $1.485,5.
Dólares Financieros en Altibajos
Los dólares financieros muestran una volatilidad considerable. El Contado con Liquidación (CCL) se comercializa a $1.520, y el dólar MEP se sitúa en $1.506. Estas cifras indican que, a pesar de los esfuerzos por contener la apreciación del dólar, la incertidumbre persiste.
Impacto del Dólar Tarjeta
El dólar tarjeta, utilizado para pagos en servicios digitales y turismo, ha escalado hasta $1.930,5, tras novedades en las percepciones de Ganancias y Bienes Personales implementadas por el Gobierno. Este aumento afecta directamente a quienes viajaban al exterior o utilizaban plataformas digitales para adquirir productos.
Intervención del Banco Central
Este jueves, el Banco Central intervino en el mercado cambiario ajustando las bandas cambiarias, fijando un límite superior de $1.474,83 y uno inferior de $948,76. Esta estrategia busca estabilizar la moneda y limitar el impacto de futuras fluctuaciones. Recientemente, la entidad vendió U$S53 millones, llevando las reservas a aproximadamente U$S39.777 millones.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, afirmó en conferencia de prensa que "el esquema de bandas está preparado para que no haya ningún tipo de problema", refiriéndose a la marginalidad de la intervención reciente. Las bandas cambiarias se ajustan diariamente dentro de un rango de ±1% mensual, lo que refleja un enfoque flexible ante la volatilidad del mercado.