El desierto de Atacama, ubicado en América del Sur, se destaca como una de las regiones más inhóspitas del planeta. Este vasto desierto, que se extiende a lo largo de 1.600 km en la costa del Pacífico, al oeste de la cordillera de los Andes, presenta un paisaje marcado por terrenos pedregosos, lagos salados y lava félsica. Su extrema aridez ha suscitado el interés de investigadores y turistas por igual, convirtiéndolo en un lugar de estudio sobre el clima y la biodiversidad.
¿Por qué es el más seco del mundo?
La aridez del desierto de Atacama se debe a la combinación de características geográficas y meteorológicas. Este desierto se encuentra encapsulado entre dos barreras naturales: la cordillera de los Andes y la corriente fría de Humboldt. La cordillera actúa como un muro que impide el ingreso de nubes cargadas de humedad, mientras que la corriente de Humboldt enfría el aire, disminuyendo así la formación de nubes y precipitaciones.
Esta interacción provoca lo que se conoce como "sombra de lluvia", un fenómeno en el que la humedad es absorbida antes de alcanzar el desierto, contribuyendo a su condición de "el desierto más seco del mundo". Según un artículo publicado en tierra Atacama, este fenómeno resalta la singularidad de Atacama en comparación con otros desiertos.
Datos de Interés
El desierto de Atacama no solo es un lugar de interés científico, sino también un atractivo turístico. La constatación de su biodiversidad y los paisajes extraterrestres han llevado a muchos a describir a esta región como un "mini Marte". Además, su estudio permite comprender mejor cómo se adaptan las especies a condiciones extremas.
En resumen, el desierto de Atacama sigue fascinando por su entorno único, convirtiéndose en un centro clave para la investigación climática y ecológica.
Comentar la noticia