En Argentina, el futuro de la movilidad se encuentra en una transformación impulsada por la conexión vehicular y la videovigilancia móvil. Se estima que el mercado de vehículos conectados alcanzará los USD 165.000 millones para 2029, creciendo a un ritmo del 17,35% anual. Para 2030, entre el 15% y el 20% del parque automotor argentino contará con capacidades de conexión, lo que permitirá la comunicación entre vehículos (V2V) y entre vehículos e infraestructura (V2X).
Beneficios de la videovigilancia móvil
La integración de tecnologías de videovigilancia a través de inteligencia artificial presenta múltiples beneficios en diferentes sectores:
- Transporte público: Aumenta la seguridad y la confianza de los pasajeros, disuadiendo delitos.
- Logística: Permite la reducción de accidentes, optimiza rutas y disminuye costos.
- Vehículos particulares: Mejora la asistencia al conductor, proporcionando mayor tranquilidad en la conducción.
Invertir en cámaras, sensores y conectividad no es solo una medida preventiva. Es una decisión estratégica que mejora tanto la competitividad como la seguridad vial.
Rol de CASEL en la transformación de la seguridad
La Cámara Argentina de Seguridad Electrónica (CASEL) juega un papel fundamental en esta evolución. La entidad promueve la adopción responsable de la videovigilancia móvil, fomenta la capacitación profesional y trabaja en la actualización de las regulaciones junto a las autoridades.
Según representantes de CASEL, “el futuro de la movilidad segura en Argentina depende de la sinergia entre tecnología, normativa y educación”. Destacan que la videovigilancia, junto con ADAS (sistemas avanzados de asistencia al conductor) y DMS (sistemas de monitoreo de conductor), será un pilar esencial de la seguridad del siglo XXI.
Desafíos en la adopción de tecnologías de seguridad
Para lograr una adopción masiva de estas tecnologías, es crucial abordar tres ejes fundamentales:
- Regulación actualizada: Establecer pautas claras sobre el uso ético de las imágenes y la protección de datos.
- Incentivos económicos: Facilitar el acceso a estas tecnologías para PyMEs y flotas urbanas.
- Capacitación técnica: Garantizar que tanto instaladores como operadores estén preparados para el uso eficaz de estas herramientas.
Los especialistas advierten que no basta con adquirir hardware; es necesario también formar a los conductores en su uso y adaptar protocolos dentro de las empresas, asegurando que la infraestructura tecnológica permanezca a la altura de las exigencias.