La reciente incorporación de chats internos a la acusación federal contra Ariel García Furfaro, propietario de HLB Pharma, y otros nueve imputados, ha revelado irregularidades alarmantes en la producción de fentanilo contaminado, un hecho que dejó un saldo trágico de 96 muertes. Los mensajes, obtenidos de dispositivos de empleados y directivos de los laboratorios involucrados, muestran un patrón de conducta que pone en entredicho la seguridad sanitaria.
Irregularidades en la producción
Los mensajes obtenidos, divulgados por el portal Infobae, indican que personal del Laboratorio Ramallo SA y HLB Pharma Group SA manipulaba reactivos vencidos y ocultaba productos peligrosos ante inspecciones de la ANMAT. En un chat fechado el 8 de marzo de 2025, se menciona la posibilidad de explosiones debido al mal almacenamiento de químicos. La frase "Pudo haber explotado eso tranquilamente" acompaña una imagen que exhibe bidones abandonados bajo condiciones climáticas adversas.
Proceso de encubrimiento
Tras la notificación de inspecciones sanitarias, el personal improvisaba jornadas de limpieza superficial, como pintar pisos descascarados, y escondía insumos irregulares. Uno de los mensajes expresa: "Estamos al horno", revelando una clara preocupación por la inminente visita de los reguladores sanitarios.
En relación con la producción del lote 31202 de fentanilo contaminado, conversaciones del 26 de diciembre de 2024 indican que los empleados estaban dispuestos a reescribir documentación de producción para "dibujar" trazabilidad, un intento por encubrir defectos en los registros.
Respuesta de la Fiscalía
La fiscal Laura Roteta, responsable de la investigación, calificó los chats como evidencia clave de que los directivos ignoraban críticas fallas de seguridad y, sin embargo, continuaron operando bajo condiciones que dañaban la salud pública. La acusación comprende a García Furfaro, su familia y técnicos responsables de fabricar, distribuir y vender fentanilo adulterado. Además, se les imputa por falsificar registros y no cumplir con los protocolos de seguridad.
Contexto del escándalo
Tras la controversia, los mensajes reflejan una atmósfera de desasosiego y tactismo para mitigar sanciones. Un empleado mencionó: "El lunes Ariel va al ANMAT para que nos levanten la inhibición… y por las dudas tengan bien guardados los solventes y demás."
Las pericias han confirmado la presencia de bacterias multirresistentes en los lotes implicados, intensificando las acusaciones contra los laboratorios. La causa es instruida por el juez federal Ernesto Kreplak, y se anticipan más detenciones a medida que avanza la investigación.