Las secuelas del fentanilo contaminado continúan causando estragos en el sistema de salud argentino. La cifra de fallecidos asciende a 34, tras la reciente muerte de un hombre oriundo de Balcarce, ocurrida el 20 de mayo. Este caso ha llevado a una investigación que involucra a varias instituciones y a un lote potencialmente peligroso de anestésicos.
Investigación en curso
La fiscalía de Mar del Plata, a cargo del fiscal Rodolfo Maure, ha recibido una denuncia del Hospital Público de Balcarce relacionada con el uso de fentanilo HLB, cuyo lote no ha sido especificado. El análisis bacteriológico de este producto reveló la presencia de Klebsiella pneumoniae y Ralstonia pickettii, dos bacterias resistentes a antibióticos convencionales.
Los fallecimientos registrados incluyen 15 en la provincia de Buenos Aires, 1 en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), y 17 en la provincia de Santa Fe. Los lugares en los que se produjeron las muertes incluyen el Hospital Italiano de La Plata con 15 casos, el Sanatorio Dupuytren (CABA) con 1 muerte, y varios hospitales de Rosario, entre otros.
Allanan laboratorios y droguerías
El lunes, la Justicia llevó a cabo allanamientos en tres droguerías y dos laboratorios involucrados en la comercialización del fentanilo contaminado. Las operaciones fueron ordenadas por el juez federal de La Plata, Ernesto Kreplak, y se dirigieron a compañías que vendieron productos elaborados por HLB Pharma y Laboratorios Ramallo.
Entre las droguerías allanadas se encuentran Federal Pharma (Regional MED SRL), Glamamed, y Alfarma SRL, esta última con vínculos directos a los laboratorios en cuestión. Estos operativos se realizan en medio del creciente temor por la seguridad de los anestésicos utilizados en hospitales y clínicas de CABA, Buenos Aires y Santa Fe.
Consecuencias del brote de contaminación
La investigación va más allá de la detección de las bacterias en el fentanilo. Se busca determinar cómo las ampollas que llegaron a los centros asistenciales fueron infectadas con estas bacterias nocivas. Un estudio preliminar del Instituto Malbrán confirma la gravedad de la situación y destaca la necesidad urgente de acciones correctivas en el sector de la salud pública.
La situación continúa en desarrollo, con autoridades de salud y justicia trabajando para esclarecer los hechos y prevenir futuras tragedias relacionadas con el uso de anestésicos contaminados.