Un bodegón en el barrio porteño de La Paternal fue allanado por la Policía Federal tras una denuncia que lo acusaba de comercializar carne de animales silvestres protegidos. El procedimiento, llevado a cabo por el Departamento Federal de Investigaciones (DFI), descubrió un total de 160 kilos de carne de diversas especies, incluyendo carpincho y ciervo, ocultos en heladeras y freezers del establecimiento.
Investigación y Procedimiento
La causa, que comenzó en mayo, se derivó de una denuncia anónima presentada ante el Departamento de Delitos Ambientales de la Policía Federal Argentina (PFA). Gracias a esta denuncia, y en colaboración con la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFEMA), el Juzgado Penal Contravencional y de Faltas N°21 autorizó el allanamiento del local ubicado en Avenida Warnes.
En la operación, se hallaron cuatro freezers y dos heladeras exhibidoras repletas de cortes de carne sin etiquetado ni trazabilidad sanitaria, lo que representa un incumplimiento grave de las normativas vigentes. Estos productos tenían un valor aproximado de 2 millones de pesos.
Hallazgos Críticos
Uno de los descubrimientos más alarmantes fue la carne de ciervo, que se sospecha podría ser del Ciervo de los Pantanos (Blastocerus dichotomus), una especie en peligro de extinción. Esta especie está protegida por la Ley Nacional 22.421, que prohíbe su caza, transporte y comercialización. Durante el procedimiento, se tomaron muestras para un análisis genético que confirmará la especie exacta.
Además, el propietario del bodegón no pudo presentar la documentación adecuada que acredite el origen legal de los productos encontrados. La falta de constancias de inspecciones sanitarias y de condiciones de conservación también fue notoria en el establecimiento.
Clausura y Consecuencias
El operativo se llevó a cabo con la colaboración del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y la Brigada de Control Ambiental de Fauna Nacional, y resultó en la clausura preventiva del local. Toda la mercadería incautada fue enviada al predio de CEAMSE para su correcta disposición como residuo orgánico de riesgo.
El responsable del bodegón, un hombre argentino y mayor de edad, quedó imputado por violaciones a las leyes de Conservación de la Fauna Silvestre y Maltrato Animal. Actualmente, se encuentra notificado de la causa que se le instruye en su contra.