El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ha emitido en la fecha de hoy una alerta naranja por fuertes tormentas que afectan a gran parte de la provincia de Buenos Aires. Se esperan intensas lluvias, ráfagas de viento y caída de granizo, que han comenzado a intensificarse desde la noche anterior y se espera que continúen durante la jornada.
Detalles de la Alerta
Desde el SMN informan que se prevén acumulados de entre 40 y 70 milímetros, aunque algunos municipios ya han reportado más de 120 mm en 24 horas. Esto ha provocado anegamientos, calles intransitables y cortes parciales en rutas y caminos rurales. El organismo también destacó que las ráfagas de viento podrían alcanzar hasta 90 km/h.
“El área será afectada por lluvias y tormentas, algunas localmente fuertes, acompañadas por abundante caída de agua en cortos períodos, frecuente actividad eléctrica, granizo y ráfagas intensas”, indicó un vocero del SMN.
Además, se mantiene una alerta amarilla en las zonas aledañas, donde se esperan tormentas y vientos fuertes, aunque con menor intensidad.
Pronóstico para el Domingo
Para el día de mañana, se anticipa una mejora significativa en las condiciones climáticas. Se pronostica que el domingo, jornada de elecciones, se presentará sin lluvias en la provincia, aunque se sentirá un marcado descenso de temperatura y vientos persistentes del sector sur, lo que hará que la jornada sea más fresca.
Recomendaciones de Seguridad
Ante la situación actual, las autoridades de Defensa Civil y el SMN han emitido una serie de recomendaciones para la población:
- Evitar circular por calles o caminos anegados.
- No refugiarse bajo árboles ni postes durante tormentas eléctricas.
- Asegurar objetos susceptibles al viento, como lonas y macetas.
- Seguir los avisos oficiales del SMN y las autoridades locales.
- Desenchufar aparatos eléctricos ante descargas o cortes de luz.
La situación se está monitoreando de cerca en toda la provincia, mientras los equipos de emergencia trabajan en las zonas más afectadas por las lluvias. Es fundamental extremar precauciones y mantenerse informados sobre el desarrollo de los eventos climáticos.
 
			
 
                            



 
                            





 
							






