Los avances en inteligencia artificial están transformando la forma en que las plataformas digitales interactúan con los usuarios, utilizando datos psicológicos y comportamentales para monetizar su atención. De esta manera, las tecnologías persuasivas han dejado de ser una mera teoría para convertirse en una estrategia comercial cada vez más presente y efectiva en el ámbito del marketing.
La "economía de la intención": el nuevo negocio de las emociones
Investigadores de la Universidad de Cambridge, Yaqub Chaudhary y Jonnie Penn, han introducido el término "economía de la intención" en un estudio publicado en la revista de ciencia de datos de Harvard. Este concepto señala que la inteligencia artificial es capaz de mapear, predecir e influir en los deseos de los usuarios, incluso antes de que estos sean conscientes de ellos.
El estudio advierte que "las herramientas de IA están diseñadas para obtener, inferir, recopilar, registrar, comprender, predecir y manipular los planes y propósitos humanos." Esto implica convertir las motivaciones individuales en una mercancía, lo que representa una nueva frontera en las estrategias comerciales.
Crecimiento exponencial en ingresos publicitarios
En el primer trimestre de 2025, YouTube generó 8.930 millones de dólares en ingresos publicitarios, experimentando un crecimiento del 10,3%. En un contexto donde los ingresos por publicidad son clave, Alphabet anunció una inversión estratégica de 75.000 millones de dólares para potenciar su infraestructura de inteligencia artificial.
Un informe titulado "La Evolución de la IA en Marketing 2025" revela que el 37% de los responsables de marketing considera que la IA es la principal fuente de éxito para la viralidad del contenido. En lugar de personalizar la publicidad según los gustos, las nuevas tecnologías son capaces de predecir y manipular emociones en tiempo real, marcando un cambio radical en el panorama publicitario.