La Asociación de Institutos de Enseñanza Privada Argentina (AIEPA) ha alertado sobre un alarmante incremento de jardines de infantes que operan sin habilitación oficial en la provincia de Buenos Aires. Esta situación se convierte en un factor de riesgo significativo para la seguridad y educación de miles de niños.
Jardines no habilitados en La Plata y alrededores
Un reciente estudio de la AIEPA ha detectado más de 100 establecimientos no reconocidos en La Plata, Berisso, Ensenada, Magdalena, Brandsen y Punta Indio. Adicionalmente, se ha encontrado presencia de jardines sin evaluación en localidades como Avellaneda, Lanús, Lomas de Zamora (20), Quilmes, Berazategui, Florencio Varela (ocho) y más de 12 en el corredor oeste del Conurbano.
Los espacios mencionados carecen de reconocimiento ante la Dirección General de Escuelas (DIEGEP), lo que les permite operar sin la supervisión estatal adecuada.
Falta de regulación y control
Martín Zurita, secretario ejecutivo de AIEPA, manifestó su preocupación sobre la ausencia de personal docente capacitado, así como la falta de supervisión pedagógica y control estatal en estos establecimientos. "Nadie garantiza qué se enseña, cómo se enseña ni quién lo hace", advirtió Zurita. Estos jardines reciben niños desde el año hasta los cinco años, incluyendo aquellas salas obligatorias del nivel inicial.
Vulneración de derechos y desprotección de las familias
Zurita también hizo hincapié en que el reconocimiento oficial es fundamental, ya que "no es una formalidad, sino una garantía del derecho de los chicos a recibir educación de calidad". Esta advertencia se presenta en un momento crítico, ya que se acerca el período de inscripción para el ciclo lectivo 2026. Durante estas fechas, muchas familias buscan vacantes y pueden ser víctimas de instituciones que aparentan estar habilitadas.
Los jardines no reconocidos no generan trayectorias escolares válidas dentro del sistema educativo, y carecen de protocolos de salud y seguridad. Esto deja a las familias sin posibilidad de reclamos ante la DIEGEP. Algunos incluso emplean nombres o logos similares a instituciones oficiales, lo que genera confusión y competencia desleal en el sector educativo.
Desde AIEPA se recordó que solo los jardines con un número de DIEGEP garantizan que el personal docente está habilitado, que los edificios han sido inspeccionados, que existen protocolos de emergencia y que tienen proyectos pedagógicos aprobados. "Elegir un jardín reconocido no es una formalidad: es una forma de cuidar a nuestros hijos. Porque educar también es cuidar", concluyeron desde la entidad.


















